El abuso de esteroides anabolizantes ha sido objeto de creciente interés, en especial a partir de algunos estudios realizados en Estados Unidos en los que se mostraba un frecuente consumo de estas sustancias con fines no médicos, y en especial por los atletas, deportistas y entusiastas del cuerpo.
Los esteroides anabolizantes (análogos de la testosterona) están disponibles para el tratamiento de distintos problemas médicos y se utilizan médicamente con dos grandes fines:
  • Por sus acciones androgénicas. La testosterona promueve la diferenciación, desarrollo y mantenimiento de los caracteres sexuales secundarios masculinos. Además regula la espermatogénesis y el comportamiento sexual de los varones. Médicamente se utiliza en los casos en los que la persona no posee suficiente hormona natural (testosterona).
  • Por sus acciones anabolizantes, es decir por aumentar la masa muscular (y específicamente por producir un balance nitrogenado positivo). Con tal fin se utilizan en casos de desnutrición severa, en el tratamiento de ciertos tipos de cánceres, anemias, etc.  
El prototipo de esteroide anabolizante es la hormona masculina testosterona. Existen otros muchos análogos sintéticos como la mesterolona, la metenolona, la nandrolona y el estanozolol. En otros países se disponen además de otros esteroides anabolizantes tales como la boldenona, oxandrolona, etc.
El desarrollo de nuevos esteroides anabolizantes ha ido dirigido a conseguir fármacos que se puedan administrar por vía oral, y además a intentar separar las acciones anabolizantes y androgénicas. Si bien ha sido factible conseguir fármacos por vía oral, el separar las funciones androgénicas y anabolizantes no ha sido posible. Es decir, en todos los casos en los que se utilicen estas substancias con fines anabolizantes, siempre se producirán efectos androgénicos (virilizantes).

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Los anabolizantes perjudican seriamente la salud

Efectos de los Esteroides Anabolizantes